Un sujeto construido en el punto de intersección de la
multiplicidad de posiciones de sujeto.
09.02.2018 - 01.04.2018
David Bestué | Lucía C. Pino | Kim Farkas | Alberto Feijoó | Žilvinas Landzbergas | Ángel Masip | David Mutiloa |
Lauris Paulus | Rodríguez-Méndez
CASAL SOLLERIC (PLANTA NOBLE).
Palma de Mallorca
Proyecto seleccionado en la Convocatoria de proyectos artísticos del
Casal Solleric línea de comisariado
Las relaciones entre la exterioridad de la obra de
arte y las aproximaciones que podemos realizar a su contexto merecen de una
actualización, en definitiva de un reenfoque sobre la implicación que tienen
nuestras subjetividades y experiencias adheridas a la hora de analizar los
procesos críticos de una época.
Permitir poner en marcha nuevas reflexiones entre los
mecanismos de percepción, los dispositivos y las ampliaciones de la creación,
supone abrirse a otros significados, más críticos y parejos a lo experiencial.
De manera habitual nos encontramos con que la
estructura física y el mensaje de la exposición son algo definido, un entorno
construido específicamente para establecer una comunicación lineal en el que de
manera eventual pueden surgir otras ideas o lecturas paralelas. Habitar estos
mecanismos requiere de otros intentos y de otras prácticas que fagociten el
pensamiento crítico si queremos adquirir un potencial más transformador. El
arte exige estar despierto, hacerse preguntas y mirar la realidad desde otro
foco, y sólo si nos dejamos llevar por la incertidumbre y abandonamos nuestra
zona de confort podremos crear nuevas estrategias capaces de generar un
pensamiento propio de nuestro tiempo.
Nos movemos en base a un conocimiento sistematizado,
establecido desde un supuesto ‘orden natural’ que modela nuestras certezas,
sujeto a la percepción a través de parámetros reconocibles. Esta forma de
percibir impone un pensamiento rígido que nos impide ahondar en otras vías de
reflexión, nos coarta y genera rechazo sobre aquello que no conseguimos
entender.
A menudo, estas consideraciones vienen determinadas
por la relación que se establece entre conocimiento y poder, determinante
ideológico de nuestro modo de percibir, interpretar e interactuar con nuestro
entorno. Un excesivo influjo del mercado al generar discursos reconocibles y
fácilmente comercializables ha ido progresivamente instaurando en
los formatos expositivos una marcada direccionalidad. Ello actúa como castrador
de la experiencia artística y el análisis crítico de los discursos, bloqueando
además los procesos evolutivos.
Unos modos de pensamiento y engagement de conceptos que se adscriben de forma cotidiana a
nuestra forma de asimilar y absorber la realidad, de como ésta se nos presenta
casi de un modo lineal de encadenamiento lógico de sucesos y donde el reto
radica en plantear relaciones dicotómicas empleando esa información bajo parámetros críticos[2].
Este proyecto surge como estrategia de cuestionamiento
hacia las estructuras perceptivas construidas, las cuales modelan nuestras
certezas e imponen un conocimiento sistematizado sujeto a parámetros
reconocibles. Para ello fija su interés en la exposición como manifestación
artística de la realidad contemporánea, un medio en el que el acercamiento al
arte se puede hacer en base a otras voluntades críticas, esas que se apoyan en una
comunidad que opera ahora desde la idea de laboratorio experiencial.
Es ahí donde tiempo y espacio expositivo se
estructuran a través de dinámicas diversas y fragmentadas, proponiendo nuevos
códigos de lectura no siempre identificables puesto que no nos hallamos ante un
"desenlace lógico" entendido como transmisión lineal de contenidos,
tal y como convencionalmente está establecida esta idea de los acontecimientos.
Invitar a pensar de otra manera nos permite hablar de
otros gestos artísticos que no se apoyan en la secuencialidad sino en un
pensamiento relacional más cercano al del hipertexto, donde no existe un orden
natural ni homogéneo de los hechos propuestos.
Un pensamiento que se apoya en la innata capacidad de
relacionar estos elementos artísticos, ideas y procesos a través de los enlaces
que cada uno establece y que va más allá de las claves de lectura
convencionales en cuanto a la asimilación de contenidos.
De este modo se nos demuestra que alejarnos de las
estructuras preestablecidas nos ayuda a volver a experimentar el mundo desde
otra perspectiva, a través de nuevos giros conceptuales y disociaciones
productivas.
El alma de este proyecto radica en poner en valor el
cuestionamiento de todo aquello que intentamos comprender al establecer
vínculos racionales, buscar la brecha o fisura en la relación que se genera
entre los distintos sistema de representación y lo que podemos definir como
realidad a través de una ecuación de resultado aleatorio, impredecible y
múltiple, en la que intervienen factores de naturaleza diversa.
[2] Gubernamentalidad y
precarización de sí. Sobre la normalización de los productores y las productoras
culturales. ISABELL LOREY. Instituto Europeo de Políticas Culturales Progresivas (EIPCP)